La Catedral de Santa María la Mayor.
La Tumba del Doncel.
La Iglesia de Santiago.
La Casa del Doncel.
El Hostal de Doña Blanca, un ejemplo de diseño, refinamiento, buen gusto y sobre todo educación y saber estar.
Y cómo no, el Parador.
Unas tiendas para el recuerdo que parecía que ya no existían. Que agradable sorpresa.
Que bonitos son y como me gustan los relojes de las estaciones de tren.
No hay comentarios:
Publicar un comentario